Un grupo de restaurantes demanda a Minneapolis y al alcalde Jacob Frey por el mandato de vacunas

Un grupo de propietarios de restaurantes y bares demandó a la ciudad de Minneapolis y al alcalde Jacob Frey por la nueva regla de que sus clientes deben mostrar un comprobante de vacunación o una prueba negativa de COVID-19 para comer o beber adentro.

Los propietarios de los establecimientos, Smack Shack, Gay 90's, Sneaky Pete's, Wild Greg's Saloon, Urban Forage, Jimmy John's y Bunkers Music Bar and Grill, presentaron la demanda el jueves por la noche en el Tribunal de Distrito del Condado de Hennepin. Quieren que un juez impida que la ciudad haga cumplir el nuevo requisito.

El mandato de vacunación de Minneapolis entró en vigencia el miércoles, una semana después de que Frey y el alcalde de St. Paul, Melvin Carter, anunciaran conjuntamente que las ciudades instituirían un mandato de vacuna o prueba para ayudar a frenar la propagación continua del virus.

Los clientes deben proporcionar prueba de vacunación o prueba de una prueba negativa de COVID-19 realizada bajo supervisión médica en las últimas 72 horas.

Los demandantes dicen que esos requisitos plantean desafíos importantes y contradicen la orientación y las recomendaciones del estado, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y los expertos médicos de todo el país, "todos los cuales promueven y alientan firmemente las pruebas en el hogar". El propósito del mandato es un intento de incitar al público en general a vacunarse, dicen los demandantes.

Frey, quien anunció la medida una semana después de restablecer los mandatos de máscaras en interiores, argumentó que los pasos agresivos para exigir vacunas en los comedores interiores son un próximo paso fundamental para evitar cierres, ya que la tasa de transmisión comunitaria de la ciudad superó los 1300 casos por cada 100 000 personas, poniendo el ciudad en "la categoría de área de alto riesgo", según los criterios de los CDC.

Francis Rondoni, uno de los abogados de Minneapolis que representan a los demandantes, dijo el viernes que el alcalde no siguió el proceso legislativo y no tiene el poder de emitir la orden.

La regulación de Minneapolis se aplica principalmente en base a quejas al sistema 311 de la ciudad. Los infractores recibirán cartas de advertencia, citaciones administrativas, sanciones civiles o enjuiciamiento por delitos menores, pero los funcionarios de la ciudad dijeron que su enfoque es educar y trabajar con las empresas.