Republicano intenta echar abajo MediCal para indocumentados
El 2024 comenzó con una gran noticia para nuestra gente indocumentada en California, el último grupo que faltaba de tener acceso a MediCal, los de 26 a 49 años, ya pueden contar con una cobertura médica completa, siempre y cuando sean de bajos ingresos.
Ahora solo esperamos que el gobierno de Gavin Newsom invierta en una buena campaña para que los inmigrantes sepan que ya pueden aplicar para el MediCal regular, y que este beneficio no cuenta como carga pública, ni les afecta en un futuro para arreglar su residencia y obtener la ciudadanía.
La entrada en vigor de la ley fue empañada por el asambleísta republicano de Riverside, Bill Essayli, pues no habían terminado de dar las campanadas del nuevo año legislativo, cuando madrugó para presentar una medida que busca anular los fondos tributarios para el MediCal de los inmigrantes indocumentados.
Según dijo el legislador, el estado no puede darse el lujo de dar cobertura de salud universal a los indocumentados, cuando tenemos un déficit de $68,000. Por lo visto, Essayli no hizo su tarea de revisar los estudios que indican que al proveer salud preventiva a los indocumentados a través de MediCal, California se ahorrará miles de millones de dólares en las salas de emergencias, que es donde van a parar los trabajadores inmigrantes sin acceso a la salud.
La alcaldesa de Los Ángeles Karen Bass abrió el año cortando listones de un refugio para desamparados en el barrio Cypress Park al noreste de la ciudad de Los Ángeles, acompañada por una de sus concejales consentidas Eunisses Hernández.
Sin embargo, el tema del desamparo podría presentar este año serios desafíos para la primera alcaldesa de la ciudad, ya que no le será fácil balancear el presupuesto frente a los incrementos salariales aprobados para los policías y el resto de los trabajadores municipales, a la vez que encuentra el financiamiento para sus programas de desamparo en especial para el Inside Safe.
El combate al desamparo está convertido en un barril sin fondo, ya que basta con darse una vuelta por la ciudad para observar como los campamentos de personas sin hogar florecen como hongos en calles que antes estaban limpias. Nos preguntamos a dónde irían los miles de millones de dólares destinados en los años pasados para el desamparo.
Sentencia en puerta
A finales de diciembre, los fiscales federales dieron a conocer que están buscando una sentencia de 13 años de prisión para el concejal José Huizar por su participación en un esquema para recibir dinero a cambio de otorgar beneficios a desarrolladores inmobiliarios en el Concejo.
Sus defensores imploran a todos los Santos para que sean solo nueve años de condena, seguramente esperanzados a que el juez se toque el corazón luego de que hace un año, Huizar aceptó su culpabilidad.
Al tratar de abonar a su causa, los abogados describieron a Huizar como un hombre con muchas fallas, mujeriego, jugador y alcohólico, que creció en la pobreza en el México rural. Recordemos que fue el primer concejal inmigrante. Y según información extraoficial, el exconcejal, está muy arrepentido de sus errores.
En honor a la verdad, si tenemos algo que reconocerle a Huizar es que ha sido uno de los concejales más trabajadores; ya que muchos solo se ponen a trabajar cuando se aproxima una campaña de reelección, el resto del tiempo se la llevan “suave”.
Lectura de cargos
Tal y como lo hicieron con el concejal Mark Ridley-Thomas, un grupo de líderes religiosos se apresta para acudir este lunes 8 enero a dar su apoyo al concejal Curren Price, durante la audiencia en la que se le dará lectura a los cargos de desfalco, perjurio y conflicto de interés en su contra al votar por proyectos que involucraron a desarrolladores ligados a la firma de consultoría de su esposa, y por no reportar tales conexiones.
Como sabemos, Price ha negado las acusaciones presentadas el 13 de junio pasado, y sus seguidores aseguran que el hombre es inocente en tanto no se le prueben las acusaciones.
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