Más de mil millones de dólares en fondos federales para la extensión del tren ligero Blue Line en Minnesota aún no están claros mientras Trump asume el cargo

El destino de más de mil millones de dólares en fondos federales necesarios para construir la extensión de la Línea Azul del tren ligero desde Minneapolis hasta Brooklyn Park sigue siendo incierto mientras el presidente electo Donald Trump se prepara para asumir el cargo el mes próximo.

En noviembre, Trump nominó al ex presentador de Fox News, estrella de reality shows de MTV y representante estadounidense Sean Duffy, un republicano de Wisconsin, para dirigir el Departamento de Transporte de Estados Unidos, el gigante federal que distribuye subvenciones críticas para grandes proyectos de tránsito como la extensión de la Línea Azul.

Duffy no ha hecho comentarios públicos sobre su hoja de ruta -en caso de ser confirmado- para el departamento federal, que tiene un presupuesto anual de 100 mil millones de dólares y un vasto alcance que incluye los sistemas de carreteras, espacio aéreo, marítimo y ferroviario del país.

Mientras la rama ejecutiva de Trump toma forma en Washington, los planificadores de tránsito en las Twin Cities seguirán trabajando en el proyecto de 3.200 millones de dólares, una expansión de la Línea Azul existente que ha estado en proceso durante al menos una década.

Si se construye, la extensión de la Línea Azul se convertiría en el proyecto de infraestructura pública más grande en la historia del estado, tal vez superando la problemática línea de tren ligero Southwest de $2.9 mil millones.

Hasta la fecha, el condado de Hennepin ha gastado unos $188 millones en la planificación del proyecto, que también prestaría servicio al norte de Minneapolis, Robbinsdale y Crystal. Se espera que el costo de construir la línea de 13,4 millas se comparta entre el condado y la Administración Federal de Tránsito (FTA).

El Consejo Metropolitano dijo en una declaración esta semana que la extensión de la Línea Azul es un "proyecto sólido que traerá inversiones significativas a la región". El organismo de planificación regional construirá y operará la línea, que está programado para comenzar a funcionar a fines de 2030.

"En lugar de especular sobre las acciones que el Congreso o el poder ejecutivo pueden tomar, seguimos avanzando en este proyecto con nuestros socios regionales y esperamos con ansias el trabajo compartido que tenemos por delante", agregó la declaración. "Un proyecto de tránsito que satisfaga las necesidades de aquellos a quienes está diseñado para servir tendrá en última instancia los elementos necesarios para obtener la aprobación".