top of page

Este es el peor zoológico del mundo donde murieron más de 500 animales



El zoológico South Lakes Safari, ubicado en Dalton in Furness, Cumbria, Reino Unido, ha sido blanco de controversias tras la revelación de imágenes perturbadoras que exhiben condiciones deplorables para los animales, gracias a una serie de fotografías que fueron capturadas entre los años de 2017 y 2019.


Las imágenes muestran una serie de alarmantes actividades que los cuidadores sostenían contra los animales, así como las condiciones que tenían sus hábitats entre otras, como una cebra atrapada en los barrotes de su corral o un capibara cubierto de heridas sangrantes.



En otro caso, una jirafa aparece con la cabeza herida después de lesionarse contra los barrotes de su recinto durante una sesión de alimentación pública, las fotografías fueron publicadas por la cadena de noticias BBC, una de las más importantes del país donde sucedieron los hechos.


Por su parte, la fundación internacional de vida silvestre Born Free realizó una inspección en octubre de 2022, en la que se identificaron múltiples fallas graves en el manejo del zoológico, de acuerdo con el informe, se encontraron rinocerontes mantenidos en compartimentos tan pequeños que no podían girar, mientras que otros animales, como primates y aves, sufrían de frío debido a condiciones inadecuadas de temperatura.


Imágenes adicionales tomadas en esa inspección revelan carne cruda abandonada en un balde afuera del recinto de los tigres, infestada de moscas, así como ratas en los recintos de mapaches. A pesar de las imágenes y la creciente presión pública, la Cumbria Zoo Company ha negado rotundamente todas las acusaciones de maltrato animal.



Otras controversias en el zoológico South Lakes Safari

En 2013, un tigre atacó y mató a una cuidadora, Sarah McClay, en un incidente que levantó serias preocupaciones sobre las medidas de seguridad del recinto, tras este trágico suceso, los administradores fueron multados con 297,500 libras por violaciones a la normativa de salud y seguridad.


Entre 2013 y 2016, un informe del Consejo de Westmorland y Furness reveló que casi 500 animales murieron en las instalaciones, lo que impulsó a la Sociedad de Protección de Animales Cautivos a solicitar la revocación de la licencia del zoológico, por lo que David Gill, propietario del recinto fue despojado de su licencia en 2017.


A pesar de la creación de una nueva organización gestora, la Cumbria Zoo Company Limited (CZCL), que prometió mejorar las condiciones en el zoológico, ex empleados han denunciado que "nada ha cambiado" bajo la nueva administración y que los animales continúan sufriendo.



Comentarios


Archivo
Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
bottom of page