El pistolero de escuela St. Louis estaba armado con un rifle AR-15 y más de 600 rondas

Un nuevo ejemplo de la violencia armadas que vive Estados Unidos se protagonizó en una escuela secundaria de St. Louis este lunes, donde dos personas murieron a manos de Orlando Harris, un pistolero armado con un rifle estilo AR-15 y más de 600 rondas de municiones

La policía de St. Louis mostró el martes una imagen del rifle utilizado por Harris, quien murió luego de intercambiar disparos con las autoridades.

“Tenía siete cargadores de municiones en una plataforma de pecho que llevaba, también tenía ocho cargadores de municiones adicionales en una bolsa de campo que había llevado“, dijo a los periodistas el jefe de policía de St. Louis, Mike Sack.

Sack dijo que el tiroteo pudo haber sido peor si los oficiales no llegaron a la escuela tan rápido como lo hicieron.

Esta podría haber sido una escena horrible. No fue por la gracia de Dios y que los oficiales estaban tan cerca como estaban y respondieron de la manera que lo hicieron, insistieron.

Sack no aclaró cómo el tirador obtuvo acceso al arma, pero enfatizó la importancia de verificar con las personas que están en peligro.

Si conoce a una persona que parece estar sufriendo algún tipo de enfermedad mental o angustia, y comienza a hablar sobre comprar armas de fuego o causar daño a otros, lo alentamos a comunicarnos con alguien e informarlo para que podamos ayudar a ese individuo” , dijo.

Harris también dejó una nota escrita a mano en el automóvil que conducía a la escuela, según la policía. Sack leyó parte de la nota durante la rueda de prensa, en la que el chico se describía a sí mismo como un solitario y hacía referencia a tiroteos masivos.

“Entonces, al leer esto, pudimos ver algo de lo que está pasando dentro de su mente. Se siente aislado, se siente solo, muy posiblemente enojado y resentido con otros que tienen lo que a él le parecían ser relaciones sanas y por lo que deseaba arremeter”.

De acuerdo a estudios recientes, la violencia armada aumentó en más del 30% en los Estados Unidos durante la pandemia de COVID-19. Los investigadores de la Facultad de Medicina de Penn State dijeron que el estrés, la violencia doméstica, la falta de interacciones sociales y un mayor acceso a las armas de fuego podrían haber contribuido al aumento.

Incluso, la organización Gun Violence Archive, establece que más de 36,2000 personas han muerto en 2022 víctimas de la violencia armada.