El gobierno canadiense lanza vallas publicitarias en varios estados que promocionan mensajes antiaranceles, incluye Minnesota

"El Gobierno de Canadá ha lanzado una campaña educativa para informar a los estadounidenses sobre el impacto económico de los aranceles. Esta campaña es una inversión estratégica en los intereses económicos a largo plazo de Canadá y en su relación comercial con Estados Unidos", dijeron.

"Los aranceles son un impuesto a los estadounidenses que trabajan duro en su vida diaria. Conducen a un aumento en los costos de los productos básicos, como el combustible y los alimentos. El objetivo es aumentar la comprensión del público estadounidense y contrarrestar la desinformación".

Las vallas publicitarias se colocaron en Arizona, Colorado, Florida, Georgia, Michigan, Minnesota, Nevada, Nuevo Hampshire, Carolina del Norte, Ohio, Pensilvania y Wisconsin, así como en Washington, D.C. y sus alrededores.

Los aranceles del presidente Trump fueron respondidos por Canadá, que posteriormente implementó aranceles contra Estados Unidos. Trump propuso aranceles del 25 % para el país y para todas las importaciones de acero y aluminio. En respuesta, Canadá amenazó con aplicar aranceles de represalia por casi 21 mil millones de dólares.

Trump anunció que aumentaría los aranceles a las importaciones canadienses de acero y aluminio al 50%, pero se retractó de la propuesta y mantuvo la tasa del 25%.

A principios de este mes, Ontario anunció que añadiría un recargo del 25% a todas las exportaciones de electricidad a Estados Unidos. Este recargo habría afectado a los consumidores y empresas de Michigan, Minnesota y Nueva York, pero posteriormente el primer ministro de Ontario, Doug Ford, anunció que Canadá suspendería dicho plan y la administración Trump desistió de duplicar los aranceles canadienses al acero y al aluminio.

En su última medida, Trump impuso el miércoles aranceles del 25% a los vehículos y autopartes importados a Estados Unidos. Los expertos afirman que la aplicación de aranceles a los automóviles importados también podría tensar las relaciones con socios comerciales clave de Estados Unidos, como Canadá, Japón, México, Corea del Sur y Europa. La mitad de los automóviles vendidos en Estados Unidos se fabrican en el país. De las importaciones, aproximadamente la mitad provienen de México y Canadá, siendo Japón, Corea del Sur y Alemania también importantes proveedores. Mientras tanto, el presidente del sindicato United Auto Workers, Shawn Fain, respaldó los aranceles impuestos por Trump a los automóviles fabricados en el extranjero y aplaudió a la administración por "dar un paso al frente para poner fin al desastre del libre comercio que ha devastado a las comunidades obreras durante décadas".