Como lidiar con compañeros toxicos, enfadosos y problematicos en el trabajo

Los compañeros de trabajo tienen una gran influencia en la satisfacción laboral. Rodearse de personas optimistas, responsables y con un alto grado de profesionalidad es lo ideal. Por desgracia, no está en nuestras manos elegir a nuestros colegas, así que es posible que nos toque un compañero difícil de tratar. Saber cómo lidiar con un compañero de trabajo conflictivo requiere grandes dosis de empatía e inteligencia emocional.

Recomendaciones sobre cómo lidiar con un compañero de trabajo conflictivo

Los compañeros de trabajo conflictivos pueden tener perfiles variados, ya que alguien puede resultar molesto de diversas maneras. Sin embargo, sea cual sea su estilo, lo cierto es que perturban el buen clima laboral. Para manejar de manera adecuada las relaciones de trabajo tienes que poner en práctica tus habilidades de resolución de conflictos y, de ese modo, evitar que el comportamiento de otros incida en tu desempeño o te afecte de manera personal.

Las siguientes recomendaciones te ayudarán a enfrentar una situación de este tipo:

Busca dentro de ti

Antes de juzgar a otra persona, lo primero que tenemos que hacer es cuestionarnos nosotros mismos. La psicología humana es muy compleja y podemos reflejar en otros nuestras emociones. Quizá lo que te molesta de tu compañero de trabajo sea precisamente un aspecto de tu propia personalidad. De alguna manera, ver a otra persona comportarse así nos pone en evidencia. Allí radica el origen del siguiente refrán: «del amor al odio hay solo un paso».

Si al leer esto reaccionas con vehemencia, es probable que tengas algo en común con tu colega. Aprovecha la oportunidad para crecer de forma emocional y extrae lecciones de esta vivencia.

Comunícate con asertividad

Exprésale a tu compañero cómo te afecta su comportamiento. Comunícate de forma directa y sin echarle nada en cara. En lugar de decir: «siempre interrumpes para decir cosas fuera de lugar», habla desde tus propios sentimientos: «pierdo el hilo de la conversación cuando no puedo terminar de exponer una idea».

Ten en cuenta que si la intención de tu colega es molestarte, es probable que esto no funcione. Sin embargo, en muchos casos estos comportamientos son inconscientes.

Averigua el contexto

A veces es necesario conocer la perspectiva de la otra persona para entender el motivo de su conducta. Procura conocer cuáles son los antecedentes, experiencias y condiciones de vida. Por supuesto, sin inmiscuirte y respetando su privacidad. Concédele el beneficio de la duda y evita los juicios preconcebidos. Cuando alguien está pasando por una situación difícil, es comprensible que su trato no sea el más amable. Intenta acercarte de manera sincera y personal. Desarrolla la empatía e intenta ponerte en su lugar.

No es necesario que investigues a fondo. Es suficiente con prestar atención a lo que hace y dice, y enfocarlo desde otra óptica. No sería de extrañar que, en el fondo, una actitud prepotente oculte temor o inseguridad. Claro que estás en todo tu derecho de exigir que te traten con respeto, sin embargo, quizás encuentres razones para ser menos susceptible.

Concéntrate en las relaciones positivas

No dejes que un compañero de trabajo molesto afecte tu disposición y compromiso con la empresa. Si crees que es imposible mejorar esa relación, trata de ignorarla y enfócate en quienes son afines. Fortalece esos lazos y genera un entorno armónico que te ayude a crecer a nivel personal y profesional. Aunque no lo creas, esas breves conversaciones casuales con los colegas influyen en la satisfacción laboral.

Habla con tu supervisor

Si el comportamiento de tu compañero de trabajo es ofensivo e infringe las normas de la empresa, denúncialo. Dejar pasar este tipo de abusos supone crear una bola de nieve que irá empeorando cada vez más. Habla con tu supervisor y coméntale lo que está sucediendo. Intenta aportar pruebas de esas conductas inapropiadas. Pueden ser conversaciones grabadas en el móvil o correos electrónicos con mensajes fuera de lugar o irrespetuosos. La empresa está en la obligación de tomar cartas en el asunto y garantizarte un entorno laboral que sea seguro y cordial.

Acepta las diferencias

A pesar de que no exista una razón de peso, puede que no congenies con algunos compañeros de trabajo. Hay personalidades que se repelen y, por mucho esfuerzo que se ponga, es complicado que lleguen a entenderse. Solo te queda aceptar que todos somos diferentes y que en este momento tienes que llevarte bien con esa persona, así que intenta encontrar algún punto de acuerdo y, sobre todo, no te cierres. Si le das la oportunidad, quizás descubras que tenéis más cosas en común de lo que pensabas.

Evita los chismes

Puede que otros compañeros de trabajo sientan lo mismo que tú. Si ves que están hablando de otra persona, evita participar en esa conversación. Compartir opiniones desfavorables sobre otro colega solo perjudicará todavía más el ambiente de trabajo. Permanece neutral y no te involucres en los chismes.