Boxeador nicaragüense murió a los 23 años tras sufrir fuerte KO en su debut como profesional

Tras haber sido noqueado hace más de tres meses en su debut como boxeador profesional, Keyving Magdiel Hernández González perdió su segundo combate y el más importante de todos el pasado jueves en un hospital de la localidad de Matagalpa, al norte de Nicaragua.

La noticia de su muerte fue confirmada por familiares y promotores. De acuerdo con lo reseñado por la agencia de noticias EFE, el trágico suceso se dio una semana después de haber sido dado de alta del hospital de referencia nacional “Antonio Lenín Fonseca”, en Managua, y como consecuencia de complicaciones respiratorias que obligaron a un segundo proceso de traqueotomía, el cual se hizo inaguantable para el joven de 23 años.

“Después de la operación, su cerebro se inflamó un poco, partes de su cuerpo dejaron de funcionar correctamente y para que él pudiera respirar le realizaron una traqueotomía en un intento siempre de salvarle la vida. Logró salir del hospital (de Managua) y después, en su casa, presentó problemas para poder respirar”, indicó Félix Alvarado, excampeón mundial de boxeo, el nicaragüense, y organizador de aquella pelea, en entrevista con el medio local ‘La Prensa’.

“La familia lo trasladó nuevamente al hospital de su localidad, donde lo volvieron a internar y le detectaron una neumonía, la cual no le permitía respirar. Eso hacía que no le llegara suficiente oxígeno y él, con su traqueotomía, no pudo aguantar y en horas de la madrugada del día de hoy falleció a causa de un paro respiratorio”, añadió.

Se encontró con la muerte tras un fuerte nocaut en su debut como boxeador

El joven de 23 años había hecho su debut como púgil el pasado 25 de marzo en una pelea que le cambiaría la vida en el segundo round después de que Bryan Mercado, también debutante, le propinara un fuerte KO que le hizo perder por la vida rápida.

Una vez consumada la derrota, González retornó a su cuidado de origen en Nicaragua, ubicado en La Dalia, departamento de Matagalpa (norte). Ahí, según el testimonio de sus familiares, comenzó a presentar un cuadro de jaqueca incesante.

El dolor de cabeza se fue haciendo más intenso y el boxeador fue trasladado a un centro asistencial de su comunidad tan sólo 24 horas después de haber sido noqueado; sin embargo, sería remitido al hospital “Antonio Lenín Fonseca”.