Atrapan a ladrones de caja fuerte con 100 mil dólares en Minnesota, uno de ellos dicen escapó a México
Se han presentado cargos contra cuatro sospechosos en relación con una invasión a mano armada a una casa en una zona rural de Minnesota en la que se robó una caja fuerte que contenía más de 100.000 dólares en efectivo; uno de los sospechosos era un ex empleado de las víctimas.
La Oficina del Sheriff del Condado de Sherburne anunció el jueves que ha arrestado a tres de los cuatro sospechosos implicados en la invasión a una casa del 18 de diciembre en una propiedad situada en la 305th Avenue Northwest, cerca de la ciudad de Baldwin.
Se cree que el cuarto sospechoso, Brandon Marlon García-Becerril, de 22 años, huyó a México. Ha sido acusado de robo en primer grado junto con Yonathan José Gamboa Zambrano, de 31 años, de Minneapolis.
La policía dice que una mujer estaba durmiendo en su casa cuando dos hombres, al menos uno de los cuales llevaba un arma, entraron por una puerta trasera del garaje que no estaba cerrada con llave y robaron una caja fuerte que contenía más de 100.000 dólares en efectivo.
Las imágenes de seguridad de la casa mostraron que uno de los sospechosos llevaba una máscara y ambos llevaban guantes, y el propietario identificó a uno de los sospechosos como García-Becerril, quien era un ex empleado suyo que recientemente le había pedido dinero prestado porque García-Becerril acababa de ser acusado de un delito con armas de fuego.
Una investigación posterior determinó que García-Becerril tenía una novia identificada como Jennifer Barrera Henriquez, de 21 años, de St. Paul, y que recientemente había estado en una casa de Coon Rapids que pertenecía a Carlos Veloz-García, de 21 años. Ambos han sido acusados de complicidad en un robo en primer grado.
Los investigadores se enteraron de que un vehículo perteneciente a Henriquez había visitado la tienda Lowe's en Coon Rapids el día antes del robo y luego había viajado a Enterprise Car Rentals. Veloz-García alquiló una camioneta a las 9 a.m. del 17 de diciembre y la devolvió aproximadamente 24 horas después, una hora después del robo, con una cantidad de millas añadidas al vehículo similar a la distancia entre el estacionamiento de alquiler de Enterprise y el área de Baldwin.
Los registros del GPS confirmaron que la camioneta había estado cerca de la casa de las víctimas en el momento del robo.
Un examen más detallado de la videovigilancia mostró que la camioneta llegó a las afueras de Lowe's en la mañana del 18 de diciembre y que se sacaron artículos de ella y se colocaron en otro vehículo que estaba estacionado en el estacionamiento, que estaba registrado a nombre del padre de Veloz-García.
Mientras Veloz-García devolvía la camioneta a Enterprise, se vio a tres personas "abrazándose y agarrándose entre sí y haciendo gestos de celebración" antes de ingresar a la tienda Lowe's, dos de ellas identificadas como García-Becerril y Henríquez. La denuncia penal señala que García-Becerril y el otro sospechoso masculino, identificado posteriormente como Zambrano, vestían la misma ropa que se observa en las imágenes de vigilancia de la casa de las víctimas.
Después de encontrar evidencia que vinculaba a Veloz-García con el robo en su basura, la policía obtuvo una orden para registrar su casa el 23 de diciembre y encontró $2,000 en efectivo en su bolsillo y "grandes cantidades de bolsas de compras nuevas con recibos" que mostraban que los productos habían sido comprados después del 18 de diciembre.
Durante el interrogatorio, Veloz-García admitió que sabía que el camión que alquiló se iba a utilizar para el robo y que ayudó a cargar y transportar la caja fuerte después. Luego le dieron $30,000 de la caja fuerte, de los cuales $23,000 se encontraron en su propiedad.
Henríquez fue interrogado y negó tener una relación con García-Becerril, alegando que la amenazó para obligarla a participar en el robo, pero la policía notó inconsistencias en sus comentarios.
Una combinación de evidencias extraídas de la basura, las redes sociales y las declaraciones de Henríquez y Veloz-García ayudaron a la policía a identificar a Zambrano como el otro ladrón, y lo encontraron en una casa que Zambrano y García-Becerril compartían en el pasado.
Durante el interrogatorio, Zambrano admitió que Henríquez había sido el conductor del robo, y dijo que García-Becerril estaba en posesión de un arma de fuego, pero dijo que era una pistola de aire comprimido. También dijo que sabía que estaban en la casa para cometer un delito, pero no se dieron cuenta de que había alguien en la casa.
La Oficina del Sheriff del Condado de Sherburne dice que hasta ahora ha recuperado $36,000 del dinero robado. La investigación continúa, y Zambrano se encuentra detenido bajo fianza de $600,000.
